¿Alguien ha dicho chocolate?

¿Cuáles son tus planes para este fin de semana? ¡Con la llegada del buen tiempo se amplían las posibilidades! Dar un paseo por la montaña o la playa, cocinar un delicioso pastel con los peques, hacer un picnic al aire libre, montar una barbacoa… ¡o simplemente descansar!

Por nuestra parte, te proponemos un plan ideal para quien le apetezca pasar tiempo en familia. Además verás que es un plan muy acorde con la Pascua que se avecina…? Y es que, en ocasiones, el trabajo, las obligaciones, el cansancio e incluso la distancia nos privan de vivir momentos relajados con los nuestros. ¿Sabías que pasar tiempo de calidad en familia mejora los vínculos afectivos, favorece la comunicación, fomenta el aprendizaje, potencia el desarrollo global y nos libera del estrés?

¡Ahí va nuestra propuesta para pasar un rato divertido y muy dulce!

@camille.lessieux nos ha dado una receta de un pastel de chocolate delicioso, ¡solo apto para amantes del dulce!

¡Apunta la receta!

Ingredientes

  • 320 g de harina
  • 40 g de harina de maíz
  • 40 g de polvo de avellana
  • 80 g de cacao negro en polvo sin azúcar
  • 100 g de azúcar moreno
  • Un sobre de levadura
  • Una cucharadita de bicarbonato
  • 450 ml de leche (puede ser vegetal)
  • Una cucharada de vinagre de manzana
  • 100 gr de aceite
  • Esencia de vainilla al gusto

Preparación:

Mezclar primero los ingredientes líquidos y agregar poco a poco los ingredientes sólidos. Remover hasta tenerlo todo bien integrado. Verter en un molde previamente engrasado y hornear a 180º c unos 25-30 minutos. Retirar del horno y dejar enfriar antes de desmoldar.

Para el glaseado:

200 g de chocolate negro fundido y 200 g de nata (mínimo 3% de grasa, puede ser también nata de coco) y agregar una cucharada de aceite de coco)

Cortar el chocolate en trozos pequeños y verter la crema previamente caliente. Remover para derretir el chocolate y lograr el praliné. Dejar enfriar.

Para terminar: 

Cuando la crema se haya enfriado, cubrir el pastel con ella y espolvorear un poco de chocolate.

Y, ¡voilà!